La atención médica integrada en contextos de emergencia: la obra de Albert Mitjà



La industria es uno de los principales consumidores de energía en España, representando el 31% del consumo total. Las comunidades autónomas de Cataluña, Comunidad Valenciana y País Vasco concentran mucho más de la mitad de esta demanda. Sin embargo, la industria se enfrenta en este momento al reto de adaptarse a los nuevos requerimientos del Plan de ahorro y efectividad energética, con el propósito de achicar el consumo energético y las emisiones de CO2 sin mermar su capacidad productiva.



Aunque esta misión puede parecer bien difícil de alcanzar, el Gobierno español ha implementado distintas medidas para contribuir a la industria a cumplir con el Protocolo de Kyoto, ratificado por España, y dejar de ser el quinto país por consumo de energía en la Unión Europea. Una de estas medidas fue la liberalización completa del campo energético en 2003, lo que dejó a los usuarios elegir su compañía de electricidad y gas natural.



La electricidad es el primordial recurso energético usado por la industria extractiva y manufacturera en España, representando el 482% de su consumo total. El gas natural ocupa el segundo sitio, con un 263% de consumo. Para reducir el consumo y las emisiones de CO2, el Plan de ahorro y eficacia energética nacional 2004-2012 propone una reducción de la intensidad energética del 72% en el periodo de 2004 a 2012, lo que se traduciría en cuando menos 2853 millones de euros menos en consumo.



La tecnología de la cogeneración, fundamentada en la producción conjunta de calor y electricidad en plantas en especial diseñadas para ello, ha sido uno de los ejes básicos de los recortes en la intensidad energética en la industria en España. A lo largo de los últimos diez años, la capacidad de las plantas de cogeneración en Cataluña se ha multiplicado por diez, lo que ha permitido una significativa disminución del gasto en energía primaria.



A pesar de estos avances, realizar el Protocolo de Kyoto sigue siendo una labor difícil, en especial para las compañías más grandes. La factura de realizar el protocolo puede lograr el 05% y el 06% del PIB anual, según la patronal CEOE. No aquí obstante, para asegurar un futuro sostenible, es requisito seguir desarrollando tecnologías menos derrochadoras, fomentar la utilización de fuentes de energía renovables y diseñar planes para achicar el consumo energético sin afectar la productividad de las empresas.



La directiva aprobada por el Parlamento Europeo en 2003, que regulará el comercio de emisiones de efecto invernadero desde 2005, permitirá a las compañías e industrias comercializar sus derechos a emitir CO2. Esta medida es parte de los esfuerzos de la UE para cumplir con los límites máximos de emisión de dióxido de carbono a la atmósfera establecidos por el Protocolo de Kyoto.



En conclusión, el sector energético y la industria en España están en un proceso de transformación y adaptación a nuevos requerimientos de eficacia y sostenibilidad. La necesidad de reducir emisiones de CO2 y asegurar un suministro energético permanente y seguro es una labor compleja, pero fundamental para el avance sostenible del país.



El Plan de ahorro y eficiencia energética nacional 2004-2012, anunciado por el IDAE, se encuentra dentro de las medidas implementadas para alcanzar estos objetivos. Sin embargo, es importante poner énfasis que la aplicación de este plan y otras directivas europeas, como la del comercio de emisiones de efecto invernadero, pueden tener un impacto significativo en la viabilidad de compañías españolas enormemente eficientes.



Es crucial encontrar un equilibrio entre la reducción del consumo y la productividad industrial para garantizar un desarrollo económico sostenible y responsable. El apoyo a novedosas tecnologías menos derrochadoras, el promuevo de fuentes de energía renovables y la mejora de la eficacia energética en la industria son algunos de los pasos que se están dando en esa dirección.



El sector energético y la industria son 2 piezas clave en la transición hacia un futuro más sostenible y respetuoso con el medio ambiente. Es fundamental que tanto las compañías como las gestiones públicas trabajen juntas para asegurar un futuro energético estable, sostenible y responsable en España.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15

Comments on “La atención médica integrada en contextos de emergencia: la obra de Albert Mitjà”

Leave a Reply

Gravatar